Putin está en lo correcto.

El presidente ruso, Vladimir Putin, criticó la libertad sexual y la libertad de género que, según él, se imponen a la gente en contra de la voluntad de las mayorías. En esa misma entrevista que le hizo El Financial Times, dijo: Esa idea progresista ya empieza a quedar superada y aunque sé que somos criticados por supuesta homofobia, la verdad es que no tenemos ningún problema con la gente LGTB. Que vivan como quieran.

Agregó: Hay algunas cosas que sí nos parecen excesivas, como por ejemplo que indiquen a los adolescentes y jóvenes que pueden jugar cinco o seis géneros. Deseamos que todos vivan felices, pero no podemos permitir que este tipo de pensamiento se imponga a nuestra tradición cultural y los valores familiares de millones de personas que componen el núcleo de la población.

Estas declaraciones de Putin en el Financial Times fueron ampliamente criticadas, incluso el músico Elton John emitió un comunicado en el que acusó al mandatario ruso de "hipócrita", por la forma en que los distribuidores rusos censuraron en gran medida la película sobre su vida, eliminando escenas donde se hace referencia a la forma tan especial de vivir su sexualidad.

Cuando le preguntaron sobre lo dicho por el famoso cantante, Putin contestó: Es un genio de la música. Pero me parece que sobre este punto se equivoca. Tenemos una actitud tranquila hacia la comunidad LGTB. No estamos en contra de ellos. El problema es que esta parte de la sociedad, bastante agresiva, impone su punto de vista al resto de la humanidad. Los padres no lo quieren, pero no se les pregunta su opinión.

En Rusia tenemos una actitud pacífica hacia la comunidad LGTB: Lesbianas, gays, transexuales y bisexuales, no estamos en contra de ellos. Solo tenemos una ley que está siendo fuertemente criticada por todo el mundo, en la que se prohíbe la propaganda homosexual hacia los menores. (Radio, prensa, cine, televisión, internet y en las calles), "Dejen que la persona crezca, se haga adulta y luego decida qué quiere ser", enfatizó Putin.

Y no está equivocado, porque en la antigüedad los sabios ya vaticinaban sobre ese tema, entre ellos George Ivanovicht Gurdjieff,  el profeta del siglo XXI. El afirmaba que si un adolescente satisface su concupiscencia, aunque sea una sola vez antes de alcanzar su mayoría de edad, ya no podrá controlarse y pierde para toda su vida la posibilidad de ser un verdadero hombre de estima. Esta actitud la comparaba con el grave riesgo de verter una sola gota de alcohol en el mosto (jugo de la uva) antes de tiempo, porque se convierte en vinagre. Cuando el adolescente llega a adulto puede hacer lo que se le antoje, porque ya será responsable de sus acciones tanto voluntarias como involuntarias.

Existen muchos libros llenos de sabiduría como el Eclesiastés en la Biblia, donde se            aconseja como educar a los hijos en la sexualidad, si no los buscamos es por negligencia.   

Antonieta B. de De Hoyos        7/24/19